¡Autocontrol!
¡Y llegó el día tan esperado! Enero. Viernes. 24. Este es el día en el que Sara, la mamá de un compañero de clase, vino para compartir un rato agradable, al mismo tiempo que nos enseñaba cómo «controlar» nuestro cuerpo. Así lo cuentan los que lo vivieron en primera persona. En esta foto, Sara nos enseña a sentarnos rectos y con los pies apoyados en el suelo.
Esta postura nos sirve para que no nos duela la espalda y para trabajar muy bien.
Para hincharlos teníamos que coger el aire por la nariz y sacarlo por la boca.
Todos nos pusimos de pie a jugar y a saltar. Sin pensar.
Teníamos que estar bien sentados y controlar el globo con los dedos de las manos.
¡No nos podíamos levantar!
Después, nos imaginamos que nosotros éramos los globos.
Sara, soplaba, soplaba y nos llenaba de aire…
Hasta que nos llenamos de tanto, tanto aire…
¡Que comenzamos a volar!
Pero nos deshinchamos…
Todos acabamos desinflados en el suelo.
Más tarde, para relajarnos un poco, Sara nos dio a cada uno una esterilla.
Nos teníamos que tumbar boca arriba, con los brazos en cruz y las piernas estiradas. Así, ya podíamos escuchar la música y relajarnos.
Para finalizar esta tarde tan especial…
Cada uno recogimos nuestra esterilla y agradecimos a Sara su visita.